Resumen:
El físico Roger Penrose plantea que el universo no tuvo un inicio absoluto.
Su modelo sugiere que cada “Big Bang” es el eco de un ciclo anterior.
Se investigan anomalías en la radiación cósmica que podrían respaldarlo.
La imagen clásica del universo como una historia con un inicio violento y un final frío podría estar incompleta. En su lugar, el físico británico Roger Penrose, galardonado con el Premio Nobel en 2020, propone una idea radical: el universo no empezó con el Big Bang, sino que atraviesa ciclos infinitos llamados “aeones”. Su hipótesis, conocida como cosmología cíclica conforme (CCC), plantea que el final de un universo —cuando la expansión se vuelve extrema y todo se diluye en una uniformidad térmica— es indistinguible del comienzo de otro.
A diferencia de otros modelos cíclicos que implican colapsos y rebotes, la CCC se basa en matemáticas conformes, una herramienta que permite comparar geometrías sin importar su escala. Según Penrose, en el “futuro lejano” de nuestro universo, la materia como la conocemos desaparecerá, y solo quedarán fotones. En ese punto, ya no habrá diferencia entre un universo que se expande para siempre y uno que acaba de “nacer”. Esta continuidad es lo que permite enlazar un aeón con el siguiente.
Penrose ha sugerido que ciertas marcas circulares observadas en el fondo cósmico de microondas —remanente térmico del Big Bang— podrían ser vestigios de agujeros negros evaporados en un ciclo anterior. Estas afirmaciones han generado interés, pero también escepticismo. Otros físicos argumentan que las señales detectadas no son concluyentes, y que la interpretación depende de cómo se procesan los datos. Hasta ahora, la CCC no reemplaza al modelo estándar, pero plantea preguntas fundamentales sobre la naturaleza del tiempo, el espacio y la entropía.
Más que una teoría completa, la propuesta de Penrose parece un espejo que obliga a mirar nuestros límites. Si el universo tuviera memoria, su silencio sería una respuesta elegante.
Fuentes:
SpringerLink - Conformal cyclic cosmology: observational consequences.